Escribo para leerme, para releerme. Es más, escribo un blog para leer, para releer, para mantenerme al día de mí.
Corroborando sin saberlo algunas de las tesis incipientes de Nietzsche balbuceadas en El nacimiento de la tragedia en el espíritu de la música, jóvenes investigadoras de la Universidad alemana de Würzburgo hallaron en las moscas de la fruta lo que llamaron “el gen de la resaca” para concluir que es éste, el gen de la resaca, el culpable de la adicción al alcohol.
Sí, escribo para leerme. Llevo un blog para leer lo que digo de mí pero luego todo me suena. El argumento en su conjunto me parece manido y previsible.
García Cívico, Jesús, (ego) aforismos en Word, poemas con auto-reverse, ¡Viva Corrales! Ed., Valencia, 2013
Los últimos días vimos Frances Ha (Noah Bumbach, 2012).
la amistad femenina como anclaje ante la desorientación en Frances Ha |
Tengo por costumbre ver todas las películas candidatas a los Oscar antes de la ceremonia de entrega de premios lo que a veces supone tener algo de conocimiento de causa pero también dedicar tiempo a más de una historia de escaso interés. Este año, sin embargo, si quitamos los tostones de Philomena y la irritante Capital Phillips el nivel de las candidatas a mejor película desde el examen de esa pieza fundamental del relato cinematográfico que es ¡el guión!, fue bueno, reseñable, como diría un inglés.
La que más me gustó es la menos pretenciosa de todas American Hustle (me encantó la historia de amor y toda la tontería que se llevan con los pelos). Creo que la mejor, sin embargo, fue El lobo de Wall Street. Scorsese se saca de la manga a su edad una estupenda mezcla de géneros y Leonardo di Caprio ofrece una actuación memorable que le hubiera valido el premio al mejor actor si no llega a ser por ese tipo en estado de gracia que es Matthew McConaughey. Buyers Dallas Club es una película más que notable y aquí por encima del guión destacan las interpretaciones de Jared Letto y sobre todo de McConaughey que ya nos había encantado en las pantanosas Mud y The Paperboy.
Gravity habría sido fenomenal si los actores se hubieran callado la boca y el director insistido en las virtudes propias del silencio; 12 de años de esclavitud es la película de un director tan bueno como Steve McQueen, que, lo creemos así, esta vez se contuvo demasiado. La banda sonora de Her es estupenda y la hemos escuchado tanto que ya no la podemos aguantar. Finalmente, Nebraska presenta un guión inteligente y un secundaria estupenda y era a la que yo hubiera apostado todo. Menos mal que nada tengo y que no me gusta apostar. Tampoco he comprado nunca lotería: aún no he resuelto si podría consentir que un tipo me entregara un premio creyendo que sabe lo que quiero o que me conoce mejor que yo.
la amistad femenina como... |
Si alguien me obligara a ordenar de mayor a menor calidad los guiones de algunas de estas películas haría algo así:
1. Eric Warren Singer y David O. Russell por La gran estafa americana (guión original) / Terence Winter por El lobo de Wall Street (guión adaptado)
2. Bob Nelson por Nebraska (guión original)
3. Woody Allen por Blue Jasmine (guión original)
4. Richard Linklater, Julie Delpy y Ethan Hawke por Before Midnight (guión original)
Luego muy lejos:
5. Craig Borten y Melisa por Dallas Buyers Club, (6) Spike Jonze por Her y (7) John Ridley por Doce años de esclavitud; y lejos en interés y en calidad, hasta el infinito y más allá los engendros llenos de diálogos y lugares comunes de Billy Ray por Capitán Phillips (8) y Steve Coogan y Jeff Pope por Philomena (9) o el lamentable escrito de Alfonso y Jonas Cuaron de Gravity (10).
¿Y todo esto a santo de qué? Ah, que estábamos cansados de tanta presión y vimos en casa de unos buenos amigos, como deber ser, una película del Video-club Stromboli, una "joyita" como dijo G. , "Frances Ha", festival interpretativo de la tocaya de G, Greta Gerwig, que no deja de sonreír agradablemente en toda la película.
1. Eric Warren Singer y David O. Russell por La gran estafa americana (guión original) / Terence Winter por El lobo de Wall Street (guión adaptado)
2. Bob Nelson por Nebraska (guión original)
3. Woody Allen por Blue Jasmine (guión original)
4. Richard Linklater, Julie Delpy y Ethan Hawke por Before Midnight (guión original)
Luego muy lejos:
5. Craig Borten y Melisa por Dallas Buyers Club, (6) Spike Jonze por Her y (7) John Ridley por Doce años de esclavitud; y lejos en interés y en calidad, hasta el infinito y más allá los engendros llenos de diálogos y lugares comunes de Billy Ray por Capitán Phillips (8) y Steve Coogan y Jeff Pope por Philomena (9) o el lamentable escrito de Alfonso y Jonas Cuaron de Gravity (10).
¿Y todo esto a santo de qué? Ah, que estábamos cansados de tanta presión y vimos en casa de unos buenos amigos, como deber ser, una película del Video-club Stromboli, una "joyita" como dijo G. , "Frances Ha", festival interpretativo de la tocaya de G, Greta Gerwig, que no deja de sonreír agradablemente en toda la película.
Los últimos días asistimos al concierto de Harmony and Dave aunque íbamos a la Wah Wah sobre todo a escuchar a Mattew Caws porque algunas de sus canciones son también, de alguna nostálgica forma, nuestras canciones.
Harmony and Dave un duo de aquí, de Valencia |
Como prueba de que seguimos siendo imprudentemente jóvenes nos gustó más esta joven pareja que la sucesión de melodías del frontman de Nada Surf.
¿Otras cosas?
Tras escucharlo tanto los últimos días, nos propusimos retener inutilmente en la memoria el estilo libre del mejor disco de Ornett Coleman, The shape of jazz to come (1959)
Randolph Denard Ornette Coleman (born March 9, 1930, Fort Worth, Texas) is an American saxophonist, violinist, trumpeter and composer. |
Y pensar seriamente en dejarnos de nuevo barba como él
Randolph Denard Ornette Coleman (born March 9, 1930, Fort Worth, Texas) is an American saxophonist, violinist, trumpeter and composer... con barba. |
Los últimos días terminamos de ver la tercera temporada de una de las mejores series de los últimos años. American Horror Story una gamberrada fresca y sexy, llena de imaginación y talento que no sería lo que es sin el festival interpretativo de Jessica Lange quien juega un papel (como dice ahora la gente anglicísticamente) diferente en cada una de las temporadas.
Inquietantes títulos de crédito creados por Kyle Cooper |
El paso del tiempo no le hecho perder la belleza sino al revés, como diría Milan Kundera la ha ido revelando en su conmovedora autenticidad.
No nos gusta nada el sadismo en el cine de terror pero los creadores de la serie Ryan Murphy y Brad Falchuk saben que no pueden prescindir de él pues funciona como contrapunto de su endiablado sentido del humor. Ver la cabeza cortada del personaje de la racista sádica Delphine LaLaurie interpretado por Kathy Bates conmoviéndose mientras, blues de fondo, contempla la serie íntegra de Raíces y escenas de la lucha por los derechos civiles que la bruja Winnie le obliga, en la pedagógica tradición de Richard Rorty a ver, es sólo uno de esos momentos que hacen esta serie difícil de describir pero también de olvidar.
En realidad Delphine LaLaurie fue irredimible |
Otro emocionante momento fue la aparición en el capítulo 10 de la bruja Stevie Nicks, cantante de Fleetwood Mac.
Fleetwood Mac |
Qué curioso. Justo estos último días he escuchado varios grupos que me han recordado el luminoso estilo de Fletwood Mac. Mi álbum preferido de Fleetwood Mac, como de tanta gente, es Tusk, su obra maestra personal, adelantada y cara de 1979.
¿Que qué grupos de 2013 me han recordado a Fletwood Mac?
Pues, Pure Bathing Club, básicamente una pareja de Portland, que sacaron en 2013 un álbum en la estela de Fleetwood Mac Moon Tides: el nuevo disco de las Dum Dum Girls, el trío de chicas de Los Ángeles; Haim, que son algo muy distinto a lo que parecen, y, sobre todo, los australianos The Preautures en la senda musical pero también estética del grupo anglo-americano de la Nicks, ese que ha estado siempre en nuestra educación sentimental y por tanto debe figurar aquí en El blog de Cívico, blog solipsista, farragoso, críptico, autoreferenciado y egotista.
Todos los grupos que hemos mencionado aquí parecen otra cosa distinta a la que son y para vencer el desconcierto y una natural resistencia hay que darles varias oportunidades. Luego ya no se les puede dejar de escuchar.
Haim |
He hecho mucho el idiota pero puedo presumir de no haberlo hecho jamás como español, como escocés, como catalán, como británico, como ruso o como ucraniano. Este de abajo es, sin embargo, un símbolo que guardo entre algunos de mis libros más preciados, es la bufanda de la revolución naranja que me regaló una poetisa ucraniana, antigua nacionalista rusa convertida luego en supranacionalista del filoeuropeismo ucraniano radical y luego ya en relajada devota de nuestro color preferido.
Los últimos días he vuelto a pasear, pues, por Sebastopol, ciudad donde de joven conseguí perderme. He vuelto para comprobar que es cierto que nadie ni nada olvida a quienes les han hecho pasar hambre.
Holodomor o Golodomor (en ucraniano: Голодомор, “matar de hambre”) |